9 Hombres de Morris
Hombres de Morris
Es un juego de estrategia muy antiguo. El más tradicional es «Los 9 Hombre de Morris» El propósito básico del juego es hacer «molinos o lineas» – líneas verticales u horizontales de tres fichas. Cada vez que se haga uno, se sacará del tablero una ficha del oponente. El objetivo general es reducir el número de fichas del oponente a menos de tres o hacer que el oponente no pueda mover sus fichas.
Descripción
El juego enfrenta a dos personas sobre un tablero formado por tres cuadrados concéntricos unidos en la mitad de sus 4 lados por líneas perpendiculares.
El juego se desarrolla sobre los 24 puntos del tablero (los 12 vértices de dichos cuadrados y las 12 intersecciones que forman con las líneas perpendiculares).
Cada jugador dispone de 9 fichas (9 hombres de Morris), de color diferente para cada uno de ellos. Las fichas se pueden mover entre ellos sólo a lo largo de las líneas marcadas. Solamente una ficha puede ubicarse en un punto. Los jugadores comienzan con nueve fichas, con un color diferente para cada uno. A diferencia de otros juegos, el tablero está inicialmente vacío. Los jugadores ubican sus fichas en el tablero en forma alternada, como se describe luego.
Objetivo del juego
El objetivo general del juego es conseguir que el contrario acabe con sólo dos fichas sobre el tablero o no pueda realizar ningún movimiento por tener todas las fichas bloqueadas.
Para ello, el objetivo inmediato es intentar hacer Lineas (tres en línea) con las fichas propias, lo que da derecho a capturar una ficha del contrincante.
Desarrollo del juego
Se echa a suertes quién es el que realiza el primer movimiento. A partir de ahí el juego tiene dos fases bien diferenciadas.
El juego comienza con el tablero vacío. En la primera fase cada jugador en su turno coloca una de sus nueve fichas sobre cualquiera de los puntos del tablero que están libres. Durante esta fase no es posible mover las fichas ya situadas en el tablero.
Una vez colocadas todas las fichas sobre el tablero comienza la segunda fase, durante la cual cada jugador en su turno mueve una de sus fichas a un punto adyacente libre a través de alguna de las líneas del tablero.
Durante ambas fases del juego, siempre que la ficha incorporada o desplazada completa una linea, esto es, una secuencia de tres fichas del mismo color situadas sobre los tres puntos de una misma línea, debe capturarse una ficha adversaria; la ficha capturada es sacada del tablero y no puede volver a ser jugada.
Siempre que se completa una linea se realiza captura, incluso aunque la linea se haya completado previamente y se repita de nuevo al retornar una misma ficha a un punto que ocupaba anteriormente. El jugador que realiza la captura elige libremente la ficha a capturar entre todas las fichas del adversario que no forman parte de alguna linea. En el caso de que todas las fichas del rival formen parte de alguna linea, elige libremente entre todas ellas.
Una vez que un jugador sólo dispone de tres fichas sobre el tablero como consecuencia de haber sufrido seis capturas, puede desplazar sus fichas libremente a cualquier punto del tablero, sin la limitación de hacerlo tan solo hacia lugares adyacentes.
Fin del juego
Un jugador vence la partida en estos dos casos:
- Cuando ha realizado 7 capturas, como consecuencia de lo cual el rival tiene sólo dos fichas y no puede formar nuevas lineas.
- Cuando el rival no puede realizar ningún movimiento por estar todas sus fichas bloqueadas.
Del mismo modo que en el ajedrez, la partida acaba en tablas en estos dos casos:
- Cuando ambos jugadores mueven 50 veces cada uno sin que se realice ninguna captura.
- Cuando se repite 3 veces la misma posición de las fichas sobre el tablero.